Cosméticos Nutritivos.

Los productos nutritivos son muy tradicionales dentro del campo cosmético y han sido destinados a contrarrestar los efectos de una piel seca y envejecida.
El concepto de cosmético nutritivo como alimento cutáneo ha sido descartado por la evolución científica de la cosmética, pero si se toma el término nutrir en su significado de fortalecer y mantener activo, la denominación sigue siendo válida.
Otras denominaciones surgieron además como sinónimos de nutritivos, aunque con connotaciones más amplias: revitalizador, rejuvenecedor, bioestimulante, etc.
Se utilizan muchos productos biológicos, entre ellos: vitaminas, proteínas e hidrolizados, aceites, complejos herbáceos, extractos glandulares, etc. Con el objeto de mejorar a condición de la piel, obtener mejor elasticidad, aumentar el caudal sanguíneo y estimular las actividades glandulares sudoral y sebácea.
Es necesario valorar el rol el vehículo en muchas de las acciones beneficiosas de este tipo de cosméticos, sus posibilidades emolientes y humectantes.
Pero es indudablemente la presencia de aceites y vitaminas lo que caracteriza a los productos nutritivos. Estos deben proveer emoliencia, ablandando la capa cornea, flexibilizando la piel y disminuyendo el endurecimiento propio de la queratinización de la piel involutiva.

ACEITES: Se utilizan aceites animales, vegetales y semisintéticos.
Animales: aceite de hígado de bacalao, rico en vitamina A (se lo reemplaza actualmente por vitamina A sintética), aceite de cisne, visón, tortuga. Se los reemplaza por el aceite de purcelina sintético.
Vegetales: Son ricos en ácidos grasos insaturados. Se utilizan los aceites de rosa mosqueta, cardo mariano, soja, uva, girasol, oliva, jojoba, palta y otros. Además algunos aceites aportan:
*B-caroteno: (precursor de la vitamina A) aceite de zanahoria.
*Vitamina E: aceite de germen de trigo, soja, palta.
*Lecitina: aceite de soja.
Semisintéticos: aceites hidrogenados derivados del aceite de algodón.
Lanolina: Extraída de la grasa de la oveja y derivados de la misma.

Vitaminas:
Fueron incluidas empíricamente en los cosméticos desde hace muchos años. Sus efectos son muy apreciados ya que en muchos casos producen resultados manifiestos. El tratamiento local permite aumentar la concentración regional de dichos principios activos. Los conocimientos actuales permiten asignarles funciones específicas a diversos compuestos vitamínicos usando en forma local. Pueden ser de origen animal o vegetal. Actualmente se utilizan mucho las vitaminas sintéticas.
Vitamina A o retinol: se halla en estado natural en el hígado de los animales; también se obtiene sintéticamente. En la piel, la vitamina A es un factor normal de crecimiento y diferenciación. Tiene una acción estimulante sobre las células vivas de la epidermis. Por su acción local se la ubica dentro de los productos antioxidantes, emolientes y revitalizantes. Ayuda a corregir condiciones de la sequedad y descamación de la piel, como restaurador de tejidos dañados y para aumentar la renovación celular.
Es un líquido oleoso, insoluble en agua; es inestable y se oxida con facilidad. Suele asociársele la vitamina E, que ayuda a mantenerla.
Vitamina B5: es el alcohol pantotenilico o pantenol, que es un componente normal de nuestra piel y nuestro pelo. En cosméticos para la piel se lo utiliza por sus propiedades epitalizantes y emolientes. Es más importante en cosméticos capilares, donde se emplea en el tratamiento de los cabellos dañados o debilitados.
Vitamina B6: Se emplea principalmente en cosméticos para el cabello, como anti seborreico y estimulador capilar.
Vitamina C o ácido ascórbico: Es un cofactor indispensable en la síntesis del coageno, proteína esencial para la función de sosten de la piel. Es un excelente antioxidante. Provee a la piel una defensa efectiva contra las radiaciones UVA y UVB, su acción fotoprotectora y aclaradora de la piel. Actua conjuntamente con la vitamina E en su acción anti-radicales libres.
Vitamina E o alfa-tocoferol: Es antioxidante. Se encuentra en la naturaleza en aceites vegetales, principalmente en el germen de trigo y palta; también se la obtiene sintéticamente. Se vincula al manto epicutáneo (emulsión natural que protege nuestra piel) aumentando la acción protectora del mismo. Es un integrante normal de las membranas celulares, donde desarrolla su acción antioxidante. Mejora la retención de agua sobre la piel. Su acción cosmética es humectante, protectora, emoliente, antioxidante y “anti-aging”. Se utiliza en productos anti radicales libres y para la involución cutánea, para prevenir arrugas, estrías y sequedad cutánea.
Vitamina F: no es exactamente una vitamina, sino la mezcla de los ácidos grasos insaturados esenciales. Está presente en los aceites vegetales. Se utiliza en productos para involución cutánea. Aporta emoliencia, elasticidad y vitalidad a la piel seca o envejecida.
Otros principios activos:
Si bien el concepto mismo de cosmético nutritivo está asociado con el contenido de aceites y vitaminas, existen otros principios activos que aportan propiedades revitalizantes para la piel. Entre otros, podemos nombrar:
Proteínas: se utilizan los hidrolizados de colágeno, elastina, placenta, péptidos del timo, líquido amniótico, etc. También se utiliza el colágeno nativo o soluble, por su poder reparador.
Extractos vegetales: se utilizan los extractos vegetales de ginseng, aloe vera, caléndulas, biofitoestimulantes, hederá hélix, uva ursi, etc.
Derivados de la abeja: La miel, la jalea real y el propoleo sirven como principios activos de cosméticos nutritivos por su contenido en vitamina, azucares, aminoácidos y oligoelementos.
Ceramidas: Son indispensables para la función barrera de la epidermis. Son componentes de los lípidos cutáneos, que ocupan los espacios entre los corneocitos formando un cemento intercelular firme y estable. Actúan en forma positiva en la restauración de la barrera cutánea lipidica. Su aplicación contribuye a reponer los lípidos de la piel con un efecto emoliente y fundamentalmente protector, ya que restaura la integridad de la barrera cutánea, evitando de esta forma la perdida de agua a traves de la piel.

Fuente: Dra. Norma Bustos.